A todos los vecinos y a cualquier persona que tenga dignidad, vergüenza y sentido de la solidaridad. Mañana, si no lo impedimos, se ejecutará un desahucio en nuestro barrio. Un desahucio más, diréis, pero es que con cada «desahucio más» nuestra sociedad pierde un poco de dignidad, un poco de justicia, un poco de humanidad.
La ley hipotecaria española ha sido cuestionada en instituciones diversas de otros países y organismos mundiales. A nosotros nos toca cuestionarla poniéndonos entre ella y las personas afectadas, y la manera es estando junto a nuestros vecinos en ese momento en que las «autoridades» pierden la razón, ese momento en el que despliegan su fuerza y su violencia sin pararse a pensar alternativas, simplemente porque pueden ejercer esa violencia. Esta vez resulta especialmente doloroso, ya que es la EMV (con un parque inmobiliario de grandes proporciones, muchas de esas viviendas vacías…) la que está dispuesta a vaciar otro de sus pisos, sin importar lo que le ocurra a las personas.
Si tu conciencia se agita ante esta situación, acude mañana a las 7,30 a la calle Arregui y Aruej esquina Nuevo Baztán.
¡Ni casas sin gente, ni gentes sin casa!
¡No vamos a permitir ni un desahucio en el barrio!
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