El sábado 18 de febrero de 2012 otro sector de nuestro barrio de Retiro amaneció con sus aceras plagadas de mensajes contra la privaticación del Canal de Isabel II, es decir del agua pública.
El agua es un derecho humano básico cuya gestión supone una gran responsabilidad, por ello el Canal de Isabel II es una empresa púbica que gestiona el ciclo integral del agua desde hace más de 150 años, en los que ha acumulado un inmenso patrimonio.
Ahora el Gobierno de la Comunidad de Madrid quiere pasarlo a manos privadas y por 50 años. ¿Puedes mirar hacía otro lado mientras te arrebatan lo tuyo? ¿Qué dirían tus mayores si viesen cómo entregas sin protestar un patrimonio ganado con sudor? ¿No crees una irresponsabilidad en la gestión convertir el agua en un monopolio sometido a accionistas privados y especuladores?
El CYII obtiene beneficios anuales de unos 100 millones de €, que hasta ahora se reinvertían en ti, al ser una empresa pública. ¿Por qué vender una empresa que da tantos beneficios? ¿Te favorecerá este monopolio a ti o al ahorro del agua?
En varios países han dado marcha atrása la privatización tras empeorar y encarecerse el 
servicio. ¡Reacciona antes de que sea tarde! Mereces que tu opinión se tenga en cuenta antes de que aten negocios con tu patrinomio ¿o tendrás que comprar acciones de lo que ya era tuyo porque ya era de todos?
No a la privatización del Canal de Isabel II
Más información en www.plataformacontralaprivatizaciondelcyii.org
El 4 de marzo: consulta ciudadana sobre la privatización del Canal de Isabel II
El 19 de septiembre de 2008 la presidenta regional, Esperanza Aguirre, anunció la decisión unilateral del PP de privatizar el 49% del Canal de Isabel II, una empresa pública que proporciona unos ingresos anuales de más de 100 millones de euros a las arcas públicas madrileñas. Poco después, el Ejecutivo de Aguirre volvió a aplicar el “rodillo” de su mayoría absoluta aprobando la polémica medida en la Ley de Acompañamiento de los presupuestos, hurtando a la ciudadanía la información, primero, y el debate, después. A juicio de la Federación Regional de Asociaciones Vecinales de Madrid (FRAVM), la privatización del 49% del canal constituye, no solo un expolio del patrimonio público, sino un atentado en toda regla de un derecho humano fundamental: el acceso un bien natural: el agua.
El polémico anuncio provocó la inmediata movilización de varias organizaciones sociales que decidieron sumar fuerzas constituyendo la Plataforma contra la Privatización del Canal de Isabel II. Desde su constitución, la plataforma ha logrado activar y extender una concienzuda lucha en defensa del patrimonio público en la comunidad de Madrid. Para ello, han convocado cerca de 160 actos públicos a los que han asistido en torno a 6.000 personas, ha convocado tres manifestaciones, han recogido 35.000 firmas contra la privatización de la empresa pública, han logrado que más de una treintena de municipios, muchos de ellos gobernados por el propio PP, se nieguen a firmar el convenio con la nueva empresa por contener cláusulas abusivas que favorecen a los grandes municipios en detrimento de los pequeños y, por último, que ocho ayuntamientos que representan a más de 500.000 electores presentaran una Iniciativa Legislativa Municipal (ILM) que obliga a la Asamblea de Madrid a someter a debate el proceso de privatización.
A la espera de que la Mesa de la Asamblea fije la fecha del debate en el Parlamento regional, la Plataforma ha decidido dar un paso más, en colaboración con el movimiento 15M, para poner de manifiesto el profundo rechazo de la ciudadanía a la privatización: convocar una consulta ciudadana el próximo 4 de marzo.
Ese día, las vecinas y vecinos podrán votar en más de 200 mesas distribuidas a lo largo de toda la geografía madrileña.
En nuestro distrito, la AV Los Pinos de Retiro Sur instalará dos: una en la confluencia de la avenida Ciudad de Barcelona con la calle Arregui y Aruej, junto al Puente de Vallecas, y otra en la esquina de la calle Doctor Esquerdo con la avenida Ciudad de Barcelona.
Demuestra que Retiro no está de retirada y ¡acércate a votar!